.- COBAO, clamor en la pandemia: frenen el cobro de las “Guías”

Imprimir

Cuauhtémoc Blas

 

Montados en su macho, no hay quien mueva a los jefes del Colegio de Bachilleres de Oaxaca (Cobao) para que dejen de hacer pagar a los depauperados padres de familia 800 pesos por las famosas “Guías de Aprendizaje”. Cada semestre hay esa inconformidad, pero en esta pandemia alcanza grados de desesperación. Piden al gobernador que los libere de tal carga innecesaria, pero no los escucha. Los diputados si atienden el clamor y exigen la eliminación de la injusta exacción, mas no les hacen caso.

 

El Cobao vende estos materiales a su clientela estudiantil a través de la seudo Fundación Cobao, ahora llamada Fundación Bachilleres de Oaxaca A. C. Sin estas guías los alumnos no pueden pasar sus exámenes, quedan fuera. Desde otros lares quedó este dicho: “Copelas o cuello”. Con fundaciones y fideicomisos se han hecho grandes negocios ilegales en este país.

 

Nunca como en estos tiempos aciagos, de cierre de empresas y de negocios, de pérdida de puestos de trabajo, estos 800 pesos que le arrancan a las familias las ha golpeado tanto. Por eso lamentan la posibilidad de que sus hijos dejen sus estudios, ante la falta de dinero. La deserción escolar es una dura realidad, fomentada así en el Cobao.

 

Jefes priistas del Cobao no perdonan

 

No hay perdón, los jefes priistas del Cobao sostienen imperturbables el cobro de este innecesario concepto. Igual que en la Secretaría de Salud y la SEP (IEEPO), con la descentralización de estos servicios del centro federal hacia los estados se abrió una amplia puerta para la corrupción. Los montos de los faltantes que la Auditoría Superior de la Federación señala de ambas dependencias en Oaxaca son multimillonarios. El Órgano Superior de Fiscalización del Estado de Oaxaca (OSFEO) halló en 2019 irregularidades en el Cobao por 26.8 millones de pesos.

 

Hasta antes de 2010, los estudiantes del Cobao adquirían para su formación libros de editoriales prestigiadas, como McGraw Hill y Editorial Patria, pero los políticos puestos a administrar las dependencias oficiales cual si fueran negocios privados, desecharon esos libros de calidad. Sin duda dijeron: ese dinero que los padres invierten en libros mejor que nos lo paguen a nosotros en “Guías”… sirve que el dinero se queda en nuestro querido Oaxaca. y, claro, mejor aún si se les queda en sus bolsillos.

 

La informalidad de estos materiales es total al carecer de registro ante derechos de autor, no tienes registro de ISBN, tampoco Código de Barras, de donde se deduce que evaden los pagos de impuestos a la Secretaría de Hacienda. Guías es un eufemismo pues realmente son antologías de más de 200 páginas; en realidad son libros de texto cuyos contenidos y manufactura son “caseros”, confeccionados por los propios empleados del Cobao, sin el personal profesional imprescindible en estos procesos altamente exigentes de pedagogía, conocimientos y edición, además de diseño y corrección. Carecen de calidad.

 

Las fallas de estos libros inician desde la presentación del director, Rodrigo González Illescas, quien presenta su mercancía con mal uso de la gramática y redacción a su clientela: “Sean ustedes congruentes con su proceder…” ¿Cómo pueden ser congruente con el proceder? La congruencia es con relación a algo. RAE: 1. f. Conveniencia, coherencia, relación lógica. Obtienen tanto dinero y ni pagan a un buen editor.

 

Más de 100 millones en la opacidad

 

Son 68 planteles del Cobao en la entidad; 38 mil alumnos. Cada uno paga 800 pesos por las “guías”, lo que arroja cada semestre un total de 30 millones 400 mil pesos; 60 millones 800 mil al año. No hay manera de saber qué hacen con tanto dinero, el portal de Cobao nada informa en su sección de transparencia, no solo del ingreso en cuestión sino de todo su presupuesto. Aquí tendría trabajo ese IAPO lleno de recomendados que nada hace.

 

La millonaria venta de “guías” es asunto de la Fundación Bachilleres, cuyo presidente, Adrián Ortiz Romero Cuevas, tampoco informa pues no le encontramos un portal de internet, sólo una informal página de Facebook. Igual no se sabe de otras millonarias entradas: las guías del propedéutico, a 600 pesos y otro tanto las de los Centros de Enseñanza Abierta; la inscripción, otros 600 pesos; además de la venta de uniformes con proveedores exclusivos… La clientela es de 38 mil alumnos en 68 planteles. Lo que arroja cada año al menos 100 millones de pesos por ingresos propios, al menos, pero es mucho más. Y no hay informes precisos de esos recursos.

 

www.revistaenmarcha.com.mx, lc.blas@gmail.com y @blaslc