Sin prensa libre no hay democracia, y, por eso, un gobierno llamado del cambio, deberá no sólo respetarla sino promoverla. Ello con las particularidades propias de Oaxaca. Con las abigarradas condiciones del medio en la entidad. Lo cual necesita de hombres con sensibilidad y vocación social. Es trascendente este asunto, por ello publicamos en este espacio la mayor parte del mensaje leído al iniciar el Tercer Encuentro de Periodistas Oaxaca 2010:
Estos encuentros reúnen a comunicadores de la entidad y de otras partes para intercambiar experiencias y tratar de enriquecer la calidad de la información que se brinda a la sociedad. En este año nos tocó analizar la sui generis coyuntura histórica que vive Oaxaca: La alternancia partidista en el gobierno estatal, las posibilidades de transición democrática y, en ese marco, los retos para la labor periodística en el nuevo contexto que se avecina.
El tema que nos reunió es Periodismo y Transición. El tema del Oaxaca de hoy. De un presente que se dio por decisión de la mayoría de los oaxaqueños, y que ha hecho posible que estemos, precisamente, en esta singular coyuntura histórica, a pocos días de la alternancia en el gobierno del Estado.
Los reclamos de los oaxaqueños son precisamente los temas centrales del trabajo periodístico: combatir la corrupción, exigir la rendición de cuentas. Aplicación de la justicia no sólo en lo que alude a los temas mencionados, sino en tantos otros casos donde la impunidad reina. Además, la gente espera de este cambio político reformas constitucionales, respeto a las instituciones ciudadanas: electorales, de derechos humanos, al municipio libre, sobre todo respeto a la libertad de expresión. Entre tantos otros temas abordados en el transcurso de estos dos días de trabajo.
En los procesos de cambios políticos y sociales, el papel del periodismo adquiere mayor relevancia. Sobre todo cuando las instituciones políticas, cuando los partidos políticos presentan una debilidad evidente, es cuando la sociedad requiere de información de mayor calidad. En estos procesos el periodismo puede alcanzar a plenitud su papel educativo, como institución no formal de educación. Este punto es el talón de Aquiles de Oaxaca, pues aun cuando los medios de comunicación alcanzaran alguna vez lo mejor en calidad, la debilidad educativa del estado propiciada por un auténtico caos en el servicio educativo seguirá siendo el mayor obstáculo para remontar pobreza, violencia entre pueblos, rezagos económicos, etc. La educación el más grande problema de la entidad, que no sólo incide en bajo número de lectores, sino también implica incultura política y no ayuda a la formación de ciudadanos.
Así, los medios de comunicación y comunicadores enfrentamos no sólo un contexto adverso, violento, que inhibe el derecho a la libertad de expresión y el derecho a la información de la sociedad, afrontamos, además, a una sociedad sin elementos formativos para dejar de ser pueblo, masa, tumulto que protesta y estalla, pero que no desarrolla las características de una ciudadanía plena, participativa, atenta, exigente de la rendición de cuentas y transparencia de sus gobernantes. No basta ir a las urnas a depositar el voto, hay que seguir exigentes de las transformaciones sociales.
No hay cambio social sin un proceso educativo de calidad, sin educación no hay civilización, ella es la base para generar cambios y soluciones políticas, y en el fondo del trabajo de comunicación el factor educativo es esencial. Por eso alarma la preferencia por la nota roja, antes que por los análisis o juicios de la situación social. En esta tesitura es que los organizadores de estos Encuentros hemos deseado contribuir al propiciarlos. Una de las preocupaciones de un gobierno del “Cambio” también debería ser contribuir a capacitar a los informadores, al mismo tiempo que arreglar el grave estado del servicio educativo de la entidad. No olvidemos lo que Juárez dijo: Gobernar es educar. Por eso preocupa que en los Foros de Consulta Popular para elaborar el próximo plan de gobierno no haya realizado foros sobre tan trascendente tema.
Tratamos estos dos días temas diversos; los de la alternancia en sí y las experiencias de colegas de fuera en procesos de alternancia en sus estados; el análisis del estado del periodismo en Oaxaca, su pasado y perspectivas; las obligaciones de los comunicadores en el mencionado contexto, los rezagos del periodismo en regiones y municipios, la represión como respuesta gubernamental, los medios alternativos, políticas de comunicación y ética y transición, entre otros. De suma importancia fue la mesa con organizaciones y colegio de periodistas y comunicadores. Un espacio que se ha abierto para la discusión de la importancia de la organización del gremio y los objetivos de dicha organización. Además de caricaturas, fotografías y portadas históricas de la revista En Marcha.
Además, en ese marco presentamos el libro “Oaxaca 2006. Autoritarismo mitos y daños. Crítica al gobierno y magisterio”. Compilación de trabajos publicados por la Revista En Marcha desde el 2006 y hasta la fecha con los temas centrales: Movilización popular y movimiento magisterial. Con una visión nada complaciente, sino crítica, como dijo su presentadora, la investigadora universitaria Gloria Zafra.