La ONU ha reprobado a México en derechos humanos. Del Examen Periódico Universal del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, resultaron 188 recomendaciones para el gobierno mexicano. Resaltan las referentes a protección de defensores de derechos humanos y periodistas. Ambos amenazados por las fuerzas de seguridad oficiales y bandas criminales. Este número de recomendaciones fue el doble del año 2009. También se ocupó de las 27 mil personas desaparecidas de 2006 a 2012, así como la impunidad que agobia a nuestro país. Se pidió eliminar el fuero e impunidad de los militares. El asunto de la violencia contra migrantes centroamericanos fue otro tema destacado. Hace unos días el obispo de Saltillo Raúl Vera López en inusual conferencia en el poder legislativo de Coahuila se pronunció en igual sentido, destacó el tema del tráfico, explotación y muerte de migrantes centroamericanos a su paso por nuestro país: “Los policías entregan a manos del crimen organizado a los migrantes, los ferrocarriles se paran para que los vigilantes les cobren mil dólares y al que no paga lo arrojan a las vías del tren”.
En 2009 el Subcomité para la Prevenciónde la Tortura de las Naciones Unidas, tras una visita en el país a 24 centros de detención, emitió un informe donde señaló numerosas fallas estructurales en el sistema penal mexicano que alientan la tortura, pero el gobierno mexicano mantuvo dicha información bajo reserva, hasta 2010.
Destaca la tortura para arrancar confesiones de culpa y violaciones a mujeres detenidas. Así como hacinamiento y condiciones infrahumanas de reclusión. Uno de los testimonios de ese trabajo sostiene: “El nivel de impunidad de las autoridades en la cárcel es más grande de lo que uno se imagina, cualquier cosa es motivo de castigo para los presos. Desde las torturas hasta la muerte.”( http://www.animalpolitico.com/2011/09/tortura-la-constante-encarceles-de-mexico/#ixzz2lOlJpODF)
Los encargados de los órganos de seguridad no son auditados ni llamados a cuentas, de ahí la impunidad que alimenta su prepotencia, como el del caso oaxaqueño que presentamos en este número. Es la cárcel de Tuxtepec otro centro de tortura de nuestro estado y
país. Aquí hay datos y testimonios de ese ilícito con lo que Oaxaca aporta su grano de oprobio a las malas cuentas nacionales a este respecto.
LXI Legislatura del oprobio
Malas, pésimas cuentas también dejaron los diputados locales de la LXI Legislatura de Oaxaca. No cumplieron ni la mitad de sus tareas dejando leyes, normas y reglamentos sin culminar. Sobre todo, el descaro con que al final se pusieron a exigir una irregular contraprestación para aprobar lo que el ejecutivo les ordenaba.
Esos diputados nunca mostraron empacho en dejarse avasallar por el ejecutivo, siempre y cuando cada votación que aquél les pidiera les fuera debidamente remunerada al grito de que toda alzada de dedo causa honorarios; la más cara fue la última donde habrían de designar nuevo Procurador, aprobar la deuda pública y la ley de transporte. Sólo hasta que cayó el dinero en sus cuentas obedecieron al ejecutivo. El grito de guerra de la panista Marlene Aldeco, secundado por priistas, petistas, perredistas, del PUP, MC de que “Si no nos depositan no bajamos a sesión”, fue preludio de su victoria. Aguantaron decididos y estoicos hasta lograr su millonario postrer soborno como diputados. Algunos están ya en otros negocios del servicio público.