Guelaguetza en crisis, aburrida y monótona, regida por políticos

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Entrevista con Vidal Ramírez, ex miembro del Comité de Autenticidad

 

Con la inclusión de nuevas delegaciones de municipios que desean presentarse en la Guelaguetza cual si fuera un certamen cualquiera, ésta se ha tornado “aburrida, monótona y hasta de choteo”. Es un espectáculo pero hay que cuidarlo, sin dejar de incorporar los naturales cambios que experimenta la vida de los pueblos, sostiene Vidal Ramírez, director de la Casa de la Cultura de Juchitán y ex miembro del Comité de Autenticidad.

Cuauhtémoc Blas

 

En un artículo sobre la Guelaguetza, Jorge Fernando Iturribarría Bolaños, el prestigiado historiador oaxaqueño, asentó que esta fiesta es un espectáculo. Desde aquellos años y con su autoridad intelectual, el también periodista dejó establecido esta caracterización de la Guelaguetza.

 

Vidal Ramírez Pineda, director de la Casa de la Cultura de Juchitán, también sostiene que estamos ante un espectáculo para deleite de propios y visitantes. Sin embargo, debe ser cuidado y preservado en lo mejor de su esencia, pero sin dejar de incorporar los naturales cambios que experimenta la vida de los pueblos.

 

Involucrado en el sector cultural de Oaxaca desde hace más de 30 años, el también Contador Público Vida Ramírez ha sido director de otras casas de cultura, Tuxtepec y Tehuantepec, además de titular de la Coordinación estatal de Casas de Cultura de la entidad, entre otros cargos. Durante su estancia en la ciudad de Oaxaca también formó parte del famoso Comité de Autenticidad de la Guelaguetza.

 

Guelaguetza en crisis

 

Con base en ese palmarés En Marcha platicó con él sobre la crisis que cada año se acentúa de la llamada Máxima Fiesta de los Oaxaqueños, la Guelaguetza.
“Nuestro estado es tan grande --dice Vidal Ramírez-- que tiene también una gran diversidad cultural. Diversidad que ha querido sintetizarse en la Guelaguetza. Pero ésta, quiérase o no, se ha visto como un espectáculo; plumas de prestigio, he incluso los integrantes del Comité Organizador y Comité de Autenticidad han dicho que es eso. De acuerdo, es un espectáculo, entonces se tiene que cuidar que algunos grupos que realmente no conservan ese profesionalismo lo adquieran, ya no digamos que tengan una raigambre tradicional.

 

“Estamos viendo que hay otros pueblos que por cuestiones de tipo de político están insertándose en este espectáculo grandioso que es la Guelaguetza. Por ejemplo, Santa María Huatulco. .. sería cuestión de ver cómo está integrada esta delegación, si vale la pena incluirla dentro de la Guelaguetza. Como hay otros pueblos que también han querido incluirse, pero aquí lo que se pretende es que se matice la cuestión cultural, que los pueblos con raigambre cultural puedan presentar algo que refresque el espectáculo de la Guelaguetza.

 

Cuando le preguntamos si le hacen falta cambios a la Guelaguetza, el conocedor de bailes y cultura de los pueblos, apoya su espalda en el sillón frente a su escritorio de la dirección de la Casa de la Cultura, y como tomando aire responde:

 

“Últimamente yo he dejado de asistir a la Guelaguetza, lo he visto por televisión y llega un momento como que cansa, como que fastidia y se tiene que hacer una selección de las mejores delegaciones con que cuenta el estado.

 

— El Comité de Autenticidad ha recibido muchas críticas. ¿Cuando tú estabas en el Comité de Autenticidad que se le exigía a los grupos participantes?
— Anteriormente se cuidaba que cada delegación o pueblo fuera muy orgulloso de sus tradiciones primeramente, y que la delegación se presentara con esa dignidad que caracteriza a cada uno de los pueblos. También que tuviera un sentido de esencia popular, y no estar presionados por grupos de tipo políticos o por autoridades municipales que solamente por querer tener una participación logran entrar a la Guelaguetza; más que por la calidad y por la belleza de sus tradiciones, entran por la fuerza. Pero eso creo ya está más en manos del Comité Organizador que del Comité de Autenticidad. Entonces, esto es lo que resta la calidad de esta festividad.

 

Ejutla excluida

 

“Ya llegaron los de Ejutla...”, el grito tradicional de esa delegación no se escuchó este año en la Rotonda de la Azucena del Auditorio Guelaguetza. La dejaron fuera por primera vez con el argumento que usan zapatillas que desde hace mucho se ha visto llevan otras delegaciones.

 

“Ejutla de Crespo… en las últimas delegaciones que yo llegué a ver bailaban con huaraches. No sé si ahora ellos...…Hay un detalle por ejemplo, cuando la región del Istmo se presentaban los caballeros con la camisa de manta blanca, pantalón de manta y con huaraches, y la mujer garbosa con un traje súper elegante y zapatillas. Si vemos en nuestras fiestas tradicionales el varón ya no usa pantalón ni camisa de manta, tampoco huaraches. Es claro que se contrapone y desmerece que el caballero tenga un traje muy humilde y la mujer uno suntuoso. Así se decidió que el hombre usara una guayabera blanca, pantalón negro, zapatos negros o huaraches de charol. Con este cambio de vestuario ya no desmerece junto a la elegancia de la dama, además se agrega el sombrero Charro 24. Aunque aquí pocos tienen ese sombrero, se llevan imitaciones pero bueno es parte de un espectáculo.

 

“Esta es una realidad, sería cuestión de analizar el caso de las ejutecas. Si ellas utilizan ahora zapatillas pues es parte también de la evolución o cambios que van teniendo lo grupos étnicos y los grupos en las diferentes sociedades de la ciudades de cada región”.

 

Los recién incluidos

 

Le comentamos que hace años se incluyó a Juquila, a instancias del político Ildefonso Zorrilla Cuevas, casi de manera excepcional, pero ahora han incluido a decenas.
“De la región de istmo se incluyó Ciudad Ixtepec en la administración del gobernador José Murat, incluso el dijo que no debía incluirse, sin embargo algunos del Comité Organizador por querer estar en el ánimo del gobernador incluyeron a Ixtepec; posteriormente se incluyó a El Espinal y poco a poco fueron insertándose otros pueblos como Ixtaltepec y Unión Hidalgo. En esta ocasión va por primera vez Huilotepec. A mí me sorprende porque digo ¿Qué tradición puede tener Huilotepec, la ciudad madre en este caso es Tehuantepec o podría ser San Blas Atempa? Este año se incluyó a Huatulco, lo que ya comentamos.

 

“Se forman grupos folclóricos, conjuntos folclóricos y al Comité de Autenticidad le parece bien y es como van apuntalando junto con otras autoridades a esas delegaciones. En el Istmo, los pueblos que mantenían esa tradición eran Juchitán y Tehuantepec desde los años 30 del siglo pasado, fueron los primeros en asistir cuando se crea la fiesta de la Guelaguetza, los que tienen dos patrones diferentes, es como el zapoteco, el tehuano y el juchiteco, son dos variantes dialectales, hablando de lengua. En cuanto a tradiciones a sones y vestuarios son los dos pueblos que marcan la pauta cultural a esta región de Istmo… pero ahora se les da participación a otros pueblos

 

Bailes repetitivos, aburren

 

¿Quién con buen temple podría dar testimonio justo de qué pueblo debería estar en este espectáculo, que llegó a llamarse la fiesta étnica más importante de América Latina, hoy en crisis?, le preguntamos.

 

“El mismo Comité de Autenticidad podría hacerlo mejor, ser más imparcial, pero a veces la decisión no recae en el Comité. Éste elige pero el que dispone al final es el Comité Organizador. Más bien yo creo que la decisión de orden político lo toma ese Comité Organizador, en este caso la Secretaría de Turismo. Por ejemplo, hay que ver que de una misma región van varias delegaciones que llevan lo mismo. En cada espectáculo van dos delegaciones del Istmo, en ocasiones Juchitán e Ixtaltepec, son los mismos sones y bailes, en lugar de que gusten caemos en el aburrimiento en el choteo, yo creo que ahí debiera llevarse una sola delegación porque son los mismos trajes, los mismos sones, la misma coreografía, empobrece en lugar de enriquecer o que sea más vistoso… cuatro delegaciones de Istmo es mucho siento yo, es como si metiéramos dos bailes de la piña. Como estamos viendo ¡Dos Chinas Oaxaqueñas!, entonces se cae en el aburrimiento y todo es por complacer a los grupos folclóricos o a las delegaciones o a los ayuntamientos que no sé quién quiera quedar bien con ellos.

 

Secretaría de Turismo, impone

 

Al reconocido gestor cultural le parece bien que los diputados locales deseen tomar cartas en el asunto de la Guelaguetza, no así las intervenciones de la Secretaría de Turismo.”Qué bien que ellos como representantes de los pueblos se interesen de que la fiesta conserve su belleza, conserve su importancia, aquí lo que se requiere es que se tengan un diálogo con los integrantes del Comité de Autenticidad para que vean si ellos han sido presionados por una dependencia, en ese caso hablemos claro si es la Secretaría de Turismo o la Secretaría de Gobierno del Estado, si las autoridades acuden con ellos para que presionen a otra dependencia. Que el Comité de Autenticidad sea más autónomo, que sea más reconocido. Yo creo que existe el talento y profesionalismo en los compañeros de Comité de Autenticidad, pero creo que se sienten rebasados por esas instancias de gobierno y de orden político que se imponen; ya no se les está dando esa autonomía institucional al Comité, que lo necesita porque estamos hablando de mucha experiencia, de gente talentosa y que si en los primeros años hubo una calidad y una frescura en las delegaciones, ahora estamos viendo lo contrario, una Guelaguetza muy prolongada, muy monótona, como que se está desvalorizando la fiesta.

 

“El Comité debe tomar una decisión o deslindarse de hasta dónde llega su responsabilidad, y decir ‘esas delegaciones no fueron propuestas por nosotros, dejar claro si no la están tomando en cuenta. Entonces, ‘si no nos están haciendo caso separarnos y háganlo ustedes pues no están respetando nuestras decisiones como expertos en la materia’. Que ellos digan ‘muchas gracias pues solamente nos utilizan…’ realmente es un trabajo honorífico, entonces que caso tiene que reciban el rechazo y hasta repudio de la gente, poniendo en cuestión su experiencia, su talento e incluso su buen nombre”.