Oralia Arreola Correa, quien hasta principios de este mes de noviembre fungía como directora administrativa de la dirección del Colegio de Bachilleres en Oaxaca (COBAO), fue separada de ese cargo por la Secretaría de la Función Pública. De hecho la señora nunca debió ocuparlo, pues se encontraba inhabilitada por esa dependencia desde el 2004.
En ese año se le inicia un procedimiento ante esa Secretaría con el expediente 224/00 y se concluye el mismo año con su inhabilitación como servidora pública por “negligencia administrativa y violación de leyes y normatividad presupuestal”, del 17 de diciembre del 2004 al 16 de diciembre del 2005.
Hizo caso omiso de esta sanción y siguió trabajando como servidora pública ostentando el cargo de jefe de la unidad administrativa en la Secretaría de Cultura de Oaxaca, en el sexenio de José Murat, cuando era secretario de cultura Enmanuel Toledo Medina.
Siguieron sus malos manejos, por lo que se le inicia otro procedimiento el 17 de enero del 2006 ante la misma Secretaría con el expediente número 15/2004 de nuevo por violación de leyes y normatividad presupuestal. Otra vez es inhabilitada el 22 de octubre del 2009, lo que concluía el 21 de octubre del 2010, además de una sanción económica por la cantidad de 199 mil 525 pesos por negligencia administrativa.
El director de COBAO, uno de los políticos de peor fama en Oaxaca, Vitálico Cándido Coheto Martínez, no obstante estar enterado de la situación de Oralia la sostuvo en el cargo. Sin embargo, ante los requerimientos de la Secretaría de la Función pública, que recientemente revisa los fondos federales que maneja el COBAO, y donde se espera corroboren los escándalos de dispendio y malos manejos, separó a la Arreola Correa del cargo. No obstante, empleados la han visto despachar los sábados en las oficinas de COBAO y durante la semana atiende en el Hotel Fiesta INN de la colonia Reforma de Oaxaca de Juárez.
Estas irregularidades también contraviene la Ley de Creación del Colegio de Bachillere, donde claramente establece los requisitos legales que debe reunir un funcionario del subsistema Colegio de Bachilleres, lo que el director general del Cobao pasó por alto al firmarle nombramiento como directora administrativa y financiera en diciembre del año 2006, y registrar sus firmas mancomunadas ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, ante la Secretaría de Finanzas del estado y para todos los documentos de carácter oficial. La normatividad de Cobao establece como requisito indispensable que todo funcionario público debe presentar constancia de no inhabilitación expedida por la Contraloría del estado antes de ocupar cargos públicos.
Desde hace meses los trabajadores del Cobao han denunciado la mala distribución de los recursos económicos de la institución, tales como los destinados a la homologación de sueldos, pago de becas de transporte y prestaciones que no han sido pagadas a tiempo. Piden auditoría y castigo a quienes resulten responsables.
Desde febrero de este año En Marcha inició una serie de reportajes sobre la situación en el Cobao, donde Oralia Arreola Correa se hallaba en el centro de los escándalos de malos manejos de recursos, hostigamiento y despido de personal, junto con el jurídico de la institución, Eduardo Aragón Calvo, protegidos por el director general Cándido Coheto.
En el número 111 de En Marcha se dio cuenta del enriquecimiento inexplicable de Arreola Correa, con las fotografías de su ostentosa residencia en San Bartolo Coyotepec. Residencia construida en un año, en una propiedad de 600 metros cuadrados, con sistema de seguridad eléctrica y acabados de cantera verde.
