Cuando en 1989 Salinas de Gortari us贸 el poder presidencial para sacar a Carlos Jonguitud del SNTE e imponer a Elba Esther Gordillo, se dio un cambio en la estructura del poderoso gremio. La nueva jefa tuvo que atender y congraciarse con las camarillas nacionales y de los estados.
El cogobierno del servicio educativo nacional SEP-SNTE se intensific贸, cargos en la SEP y dinero del sindicato a los jefes de esas camarillas, as铆 como posiciones en la estructura federal (ISSSTE, Loter铆a Nacional), diputaciones, senadur铆as, sirvieron para afianzar a la nueva jefa.
Este corporativismo se adapt贸 a los 鈥渘uevos鈥 tiempos no priistas, donde las camarillas, lideradas por la gran jefa han obtenido m谩s posiciones y m谩s variadas que en la 茅poca priista. La persistencia de este grupo corporativo confirma la continuaci贸n del gobierno autoritario con poca mejor铆a en la calidad de nuestra democracia.
Carlos Ornelas, destacado te贸rico de la educaci贸n, introduce el concepto de Camarillas en sus an谩lisis, muy 煤til para entender Oaxaca, donde grupos de esa 铆ndole dominan la estructura de la 22, en forma similar al cogobierno nacional, ac谩 en la conocida fusi贸n Secci贸n 22-IEEPO, donde la primera ocupa ya los mejores cargos: coordinaciones generales, jefaturas de departamento, supervisiones, etc. Pero a煤n no se acomoda a un gobierno estatal no priista.
Ornelas define:
El empleo del vocablo camarilla insin煤a a individuos que se coaligan para proteger intereses ileg铆timos dentro de alguna instituci贸n, no defienden una causa espec铆fica, aunque puedan utilizar cierta ret贸rica con el fin de ganar adeptos. Me parece que camarilla tiene mayor poder explicativo que otros conceptos porque implica corrupci贸n y juegos de poder ileg铆timos que se institucionalizaron, como el SNTE en sus relaciones con la SEP y las autoridades de educaci贸n de los estados (Nexos, mayo 2011, p谩g. 56).
Alrededor de 13 camarillas que dominan la estructura estatal de la Secci贸n 22 fueron desatendidas por la alta burocracia actual del IEEPO, que se centr贸 en los dirigentes formales, lo que puso en conflicto la relaci贸n entre esa dirigencia y las camarillas, que se evidenci贸 con claridad en las asambleas generales y habr铆a llevado a estallar con fuerza el conflicto de este mayo 2011, cuando se esperaba una temporada de terciopelo como supuestos aliados para el triunfo del gobierno de coalici贸n. Urge saber qu茅 hacer con esas camarillas.