La Asunción, 32 años de crecimiento empresarial

Una reflexión a propósito de un caso de éxito


En este marzo, el corporativo oaxaqueño La Asunción cumplió 32 años de ofrecer servicios y empleos en la entidad. En ese marco su fundador señor José Luis López Pérez recibió un justo reconocimiento por esta labor de más de tres décadas. A propósito de ese acontecimiento el director de En Marcha escribió estas líneas.

 

Pobreza empresarial, pobreza social

 

La pobreza de América latina se debe básicamente a su escaso desarrollo empresarial, no hay realmente Iniciativa Privada (IP) y, con ello, tampoco la posibilidad de creación de riqueza que pueda ser derramada sobre los demás sectores de la sociedad. Aunque los malos gobiernos contribuyen a acentuar este atraso, estamos pobres porque no hay producción de riqueza, y por ende no hay empleos, no hay efectos multiplicadores de la economía.

 

La política no produce empleos productivos, si bien el gobierno puede contribuir con políticas públicas que incidan en potenciar sectores de la producción y la economía, esencialmente corresponde a la iniciativa privada el desarrollo económico, de la investigación, la innovación y adelantos tecnológicos. De la IP depende el bienestar de una sociedad al ofrecer bienes y servicios de calidad y empleos bien remunerados.

 

Sector público, preeminente en México

 

Hoy, inmersos en la llamada economía del conocimiento, el sector público sigue siendo el mayor productor de investigación científica en México, con la UNAM que hasta hace poco producía el 70 por ciento de la investigación nacional, así como otras instituciones públicas, quedando un mínimo en manos de la industria. En los Estados Unidos la relación es al revés, la IP produce más del 70 por ciento de la investigación de ese país.

 

De ahí que no sea extraño que el hombre más rico del mundo sea Bill Gates con su empresa de conocimiento en desarrollo de sistemas operativos computacionales, Microsoft, de nuevo haya superado al mexicano Carlos Slim en el ranking de los hombres más ricos del mundo, de acuerdo a la lista que cada año realiza la revista Forbes.

 

Slim compite por el puesto del hombre más rico del mundo pero con un conglomerado empresarial que es prácticamente un monopolio con el que vende a precios altos servicios de regular calidad en países pobres. De cualquier forma, tampoco se pueden escatimar las capacidades empresariales de Carlos Slim, aunque acordes a un país de los llamados del tercer mundo.

 

Si hubiera más empresarios que políticos

 

Empero, uno y otro ofrecen posibilidades de empleo y desarrollo en sus respectivas naciones, incluso más allá de éstas. Por ello, la existencia de más empresarios es lo que nuestras sociedades necesitan. ¡Ah! si tuviéramos en Oaxaca más empresarios que políticos.

 

Lamentablemente en Oaxaca hasta los hijos de los viejos empresarios en vez de seguir en ese giro creativo que ofrecería empleo en la entidad, se han ido por el camino cómodo y rápidamente redituable de la búsqueda de puestos públicos para hacer dinero fácil con el manejo del erario.

 

Quizá venga al caso esta introducción que tiene que ver con la pobreza empresarial de nuestro medio, pero también para hablar de una excepcional empresa oaxaqueña, fundada por un hombre de Capulalpam de Méndez (pueblo de la Sierra, catalogado como mágico) hace 32 años, extendida y apuntalada por esposa e hijos, y un grupo compacto de colaboradores. Se trata de Don José Luis López Pérez y su empresa La Asunción.

 

Modelo empresarial de Oaxaca

 

Sin duda modelo de iniciativa privada de Oaxaca y parte substancial de la historia empresarial de la entidad. De nuevo se confirma que el sentido común es el menos común de los sentidos, en tanto La Asunción sencillamente se ocupó de transformar y ofrecer directa o indirectamente bienes provenientes de la principal vocación productiva de la entidad, el sector forestal.

 

Oaxaca ocupa el tercer lugar nacional en bosques y selvas. Lo forestal constituye la principal riqueza de Oaxaca, su principal potencial productivo, sin embargo se calcula que más de un 20 por ciento de su riqueza forestal natural ha sido perturbado o está en peligro de extinción. Un aprovechamiento racional sería lo pertinente, o mejor aún el establecimiento de plantaciones forestales como los de La Asunción.

 

La hazaña de emprender en entidad débil

 

Como dijera en sus memorias Sam Walton —el genio empresarial creador de Wal Mart—, Don José Luis también podría decir: “Yo no quería el dinero, quería la hazaña”. Con la proporción guardada, ambos sencillos, sin ostentaciones, usando su capital en crecer, en impulsar sus iniciativas. El mayor lujo de Walton era una camioneta nada nueva y sus perros de cacería con los que realizaba su hobbie.

 

Como pocas empresa de Oaxaca, surgidas y consolidadas acá, ha resultado toda una hazaña hacerlo en este medio, en el estado más pobre del país, con un mercado interno por lo mismo débil, con el per cápita más bajo, es la hazaña del señor López, la búsqueda de mercados poco aprovechados y una oferta pertinente. Ahora avanza en el reto de salir de Oaxaca a otros mercados, en eso está, ahora con sus descendientes.

 

Aquí podemos confirmar lo que se ha escrito en las historias de éxito de las empresas: que se requiere un mínimo de 30 años para consolidar una firma. Y de esas empresas limpias, son pocas las que logran salir a competir fuera del estado. En el estado de Oaxaca se cuentan con los dedos de una mano.

 

“Ecológicamente Responsable”

 

El eslogan de la empresa “Ecológicamente Responsable”, con lo que se alude sobre todo a la explotación racional de la madera de plantaciones forestales que trabaja en las regiones de la Sierra y la Costa. El tratamiento y la transformación industrial de esa madera, la producción de muebles no sólo no daña los ecosistemas sino contribuye a su conservación.

 

El aprovechamiento integral, hasta de lo que antes fueron desechos ahora en muebles del llamado material aglomerado (MDF grabado), incide tanto en el mejor aprovechamiento de los árboles como en la producción de bienes de bajos precios, además de los empleos directos e indirectos que se generan.

 

La sensibilidad que recomienda Bill Gates, apasionarse por lo que se hace, es lo que seguramente llevó al empresario oaxaqueño a ser acá pionero en trabajar esas plantaciones forestales. Entre otras variedades sembradas en Pochutla (de lo que fuimos testigo hace años), destacaba la de pochote (o ceiba, el árbol sagrado de los mayas que los transportaba al inframundo). Árbol que, precisamente, dio nombre a Pochutla, bosques casi desaparecidos de aquel paisaje.

 

En medio del emotivo reconocimiento a su exitosa labor, era necesario preguntar a Don José Luis si esos pochotes habían quedado como él aseguró entonces: para recuperar ese bosque de antaño. Cuando se lo preguntamos dijo: sí, ahí están, intactos. Por eso también, como expresó el señor Evelio Cruz en el 32 aniversario de La Asunción: “No se trata de ensalzar sino de reconocer este trabajo”, estas capacidades y esfuerzo personal que, finalmente, han resultado en beneficio de Oaxaca. Y nada más pleno para un ciudadano que ser de verdad útil a su sociedad.