Los 38 mil pesos que la Secretaria de las Culturas y las artes de Oaxaca quería ahorrarse al año al dejar de comprar los periódicos para la Hemeroteca Pública de Oaxaca, son nada o casi nada al lado de los 5 millones de pesos que necesita para el proceso de digitalización de sus documentos históricos.
Mucho de ese material está ya en peligro de perderse, papeles tan viejos que con el sol o el aire se desintegran. Parte de la memoria histórica de Oaxaca en el abandono. La institución tiene décadas desatendida; no ha tenido otro director desde la muerte de su fundador en febrero de 2001, Néstor Sánchez Hernández, quien fue su director honorario.
Las carencias son muchas y se han acentuado recientemente; parece que quisieran desaparecer a la Hemeroteca como a la Orquesta Sinfónica o el Museo de Palacio. Suspender el servicio de lectura de diarios fue la gota que derramó el vaso.
Carencias de la Hemeroteca
Las necesidades de la institución están desatendidas, los empleados laboran con carencias elementales:
1 No les surten material de encuardernación.
2 No tienen material de oficina.
3 No hay material de limpieza.
4 No tienen acceso a las computadoras.
5 No hay servicio a los archivos computarizados.
6 Tampoco tienen acceso a la copiadora.
7 No cuentan con un director.
8 La Hemeroteca no figura en el organigrama de la Secretaría. No está en la estructura del gobierno.
Después de dos meses, y ante la inconformidad generalizada contra la decisión de Ana Isabel Vásquez Colmenares Guzmán, titular de Cultura, se restituyó el servicio de diarios y revistas de la Ciudad de México. Sin esta presión, seguramente, éste hubiera sido el primer paso para desmantelar esa institución de los oaxaqueños.
16 años olvidada por el gobierno
Hay qué decir que la Hemeroteca ha sido relegada desde hace años, hace 16 años. Ha funcionado por los trabajadores de base que se encargaron no sólo de dirigir a la institución sino también de realizar eventos culturales que la posicionaban socialmente: exposición de pinturas, conferencias, ciclos de cines, coloquios. Además de darse tiempo para capacitar a sus compañeros de ahí mismo o de otras áreas en el proceso de encuadernación. Además, digitalizaron casi por su cuenta los fondos más antiguos.
Quienes asistimos a la Hemeroteca podemos decirnos satisfechos con el servicio amable y eficiente de los empleados. A pesar de las carencias, las salas están limpias y en orden. En los últimos meses del gobierno pasado nombraron a un responsable que fue despedido por esta nueva administración antes de tener a su sustituto. Actualmente la Secretaría de las Culturas y las artes sostiene una convocatoria solicitando un “responsable”.
Hemeroteca, historia de esfuerzo
La Hemeroteca inició sus labores en octubre de 1972, en la planta baja del Teatro Macedonio Alcalá; en 1994 fue trasladada a su sede actual del Centro Cultural Santo Domingo, en la parte más nueva de ese complejo arquitectónico , la que ocupara el Ejército Mexicano. Los materiales que durante años acopiara con paciencia y esfuerzo el periodista Néstor Sánchez, con la aportación de otros oaxaqueños cultos, se localizan en salas especiales.
Son tres las salas de consulta, una donde se leen los periódicos del día y del mes, que está a la entrada del inmueble; otra en la sala de archivo con materiales de años pasados; y otra llamada de investigación. Los muebles son de sobria elegancia que en nada desentonan con el entorno arquitectónico y natural del ex Convento de Santo Domingo. Espacio del conocimiento que trasciende tiempos y malos gobiernos. Un legado en el Centro Histórico del Oaxaca Patrimonio de la Humanidad que debe defenderse y preservarse. (C. Blas)