Con una trayectoria de 25 años, Guadalupe Ríos ha pasado de la nota diaria al periodismo de investigación, incluso histórica. Siempre como reportera, lo que le ayuda a nutrir sus trabajos sobre temas de trascendencia. Es especialista en los conflictos de Chimalapas, indocumentados y eólicos, entre otros. Mujer preparada, egresada de la UNAM, aún promete más al anunciar que trabaja un libro crítico sobre las Velas y tradiciones istmeñas. Con sus respuestas a un decálogo de preguntas de En Marcha nos describe su trayectoria.
1.¿Qué te dio por estudiar periodismo?
Tuve que decidir muy temprano, desde la secundaria pues tenía el deseo de ir a estudiar al DF, entonces leí sobre las carreras y encontré que esa era la carrera que se apegaba más a mis inquietudes. Yo estudié la preparatoria en CCH Vallejo de la UNAM con la especialidad de Ciencias de la Comunicación y de ahí la carrera en CU.
2.-¿Y cómo fue que te tomaste en serio eso de ser periodista?
Cuando terminé la carrera y regresé a Juchitán deseaba incursionar en el mundo de la radio. Busqué espacios en las radios locales comerciales pero me topé con que tenía que comprar el tiempo aire y conseguir mis patrocinadores eso me desanimó, no era lo que imaginaba. Entonces voltee a ver a la prensa escrita y se me presentó la oportunidad de trabajar como corresponsal en NOTIMEX, después me buscaron del periódico La Jornada y así comencé a meterme a fondo al mundo del periodismo.
3.-¿Querías componer el mundo o sólo Juchitán?
Cuando terminé la carrera, como la mayoría de los universitarios, también creí que podía cambiar el mundo, después me di cuenta que si acaso podría cambiar cosas en mi pueblo, en mi colonia, en mi entorno. Conjugué mi trabajo periodístico con la participación política. Lo mismo hacía boletines, propaganda política para la COCEI que fue la organización que me invitó a colaborar- y me convertí en coordinadora de mi colonia y presidenta de un Comité de Mujeres. Combiné mi trabajo periodístico con la militancia en la izquierda elaborando hojas volantes, boletines, carteles, programas de radio, etc.
4.-¿Cuáles fueron tus primeras experiencias con los medios de comunicación locales o regionales?
Después de frustrarme en la búsqueda de espacios en la radio comercial, opté por la prensa escrita. Mis primeros trabajos los publiqué en un periódico estatal “El Gráfico” y estaba feliz porque mis notas salían en primera plana, pero cuando vi que me querían pagar con periódico, vino de nuevo la decepción. Luego trabajé en Notimex, y estuve un año en un noticiario radiofónico con Alberto López Morales, trabajé junto con Wenceslao Añorve en la sección regional del periódico Noticias, después en el periódico El Extra. Es curioso pero en los medios locales no trabajé nunca, solo enviaba colaboraciones.
5.-¿Entonces tu ingreso fue directo a medios estatales y nacionales?
Efectivamente. El primer lugar en que publiqué una nota fue en un espacio estatal y los siguientes fueron de nivel nacional cuando entré a Notimex. Llegaron a publicarme en portada en el periódico El Nacional y alguna vez en la portada de La Jornada y en ambos medios duré unos 7 años.
6.- ¿Cuáles son tus temas preferidos?
Las circunstancias me llevaron a trabajar temas sociales: conflictos agrarios entre ikoods de San Francisco del Mar y zapotecas de San Francisco Ixhuatán, la lucha de los comuneros de San Miguel y Santa María Chimalapa por la defensa de su territorio en contra de la invasión de ganaderos y propietarios de Chiapas y todo lo que ha traído aparejado hasta la Controversia que está en la SCJN, el tema de los indocumentados centroamericanos en su paso por territorio istmeño y temas políticos y sociales en general.
7.- Desde tu punto de vista, ¿de qué adolece el periodismo local?
De compromiso, de periodistas que amen su trabajo, que investiguen y vayan “hasta el lugar de los hechos”. Hace 25 años en Juchitán éramos menos de 10 comunicadores, entre los que trabajaban en radio y en prensa pero cubríamos físicamente los 22 municipios. Hoy hay más de 25 comunicadores y comunicadoras y pocos salen a las comunidades a investigar. Las herramientas digitales como el teléfono celular y el internet sustituyen el trabajo de campo y facilitan la copia de información. Hace falta trabajar para generar la noticia, investigar y hacer reportajes; no se trabaja la crónica, y la entrevista se ha convertido en la base de la información; los reporteros se volvieron voceros de funcionarios y políticos, pero no en voz del pueblo. Las radios comunitarias se limitan a recibir mensajes y no se corroboran los datos, no hay trabajo de investigación periodística.
8.- ¿Qué propones para mejorarlo?
Talleres de capacitación periodística. Hay muchos compañeros y compañeras que no tienen una formación académica, que desconocen las bases del periodismo, que no saben que existen reglas y una ética profesional. No se trata de escribir o de hablar porque tenemos el equipo o las herramientas. Se requiere ser profesionales y para eso tenemos que aprender.
Propongo organizarnos para impulsar talleres donde venga gente capacitada y con experiencia para que nos enseñe el manejo de las herramientas digitales modernas pero también que nos enseñe lo que nunca debe cambiar: que el periodismo es compromiso social, no debe estar al servicio del poder sino del pueblo.
9.-¿Qué reportajes, temas o experiencia te han causado más alegría o satisfacción?
Muchos pero recuerdo en especial cuando me tocó ir a Jalapa del Marqués a cubrir una nota sobre el descubrimiento de unos restos de animales prehistóricos. Esa nota me valió para ganar un premio como nota informativa. Otro tema fue el descubrir que en la zona de San Francisco La Paz municipio de Santa María Chimalapa habían restos de la cultura Olmeca. También me tocó cubrir la marcha zapatista del EZLN en Juchitán y la presencia del Ejército Popular Revolucionario (EPR) en Huatulco. Ha sido experiencias muy interesantes.
10.- Para ti ¿qué es el periodismo y qué planes tienes para adelante?
El periodismo es un servicio. Es dedicar tu mirada, tu oído, tu voz y tus capacidades a difundir, a hacer visibles temas sociales que desde el gobierno o desde el poder prefieren que permanezcan silenciados, ocultos y la labor de los periodistas es ponerlos sobre la mesa de debate, en la prensa diaria, las revista, la radio, la TV, las redes sociales.
¿Qué planes tengo? Después de caminar como reportera durante décadas ahora me dedico más al periodismo de investigación y siento la necesidad de ahondar en temas que considero importantes para mi comunidad, para mi región. Estoy trabajando en la redacción de un libro sobre las Velas de Juchitán. Espero concluirlo el próximo año y ya he avanzado con algunas líneas que nuestros lectores y lectoras de esta Revista En Marcha ya han tenido oportunidad de conocer.