Diego Santos, de Tehuantepec, lo peor de 2009

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tehuano“La mediocridad y la incapacidad política de Diego Santos la demuestra porque ni siquiera puede solucionar el problema del mercado. En unos meses cumplirá Tehuantepec dos años en que los comerciantes están contaminado y afeando la ciudad enfrente del palacio, sin que se vea ninguna solución”, dicen los críticos de Diego Santos Díaz.

Tampoco se sabe nada del dinero que recibe cada año el Ayuntamiento (es decir, Diego Santos) por los  permisos para la venta de cerveza de la Agencia Modelo y de la Carta Blanca. Al final del trienio anterior entregaba, cada una, 700 mil pesos anuales; más listo, el nuevo presidente mejoró  la oferta, ya que en esta administración, el neopriista Diego cobra a las cerveceras un millón a cada una. Sin embargo, de ello no ha informado al cabildo.
Por eso, Eduardo Esponda secretario general de la Asamblea Ciudadana dice: “¡Sería una falta de respeto al pueblo de Tehuantepec que Diego Santos Díaz dé un informe al pueblo!, si no cumplió con el mandato ciudadano, cuando no priorizó  obras en este año, cuando nadie sabe cómo aplicó los recursos del 2008 y el pueblo quedó sin obras”.
okquema_de_tehuantepec_046Por su parte el regidor de Salud, Pedro Mijangos Montero exclama: “Seria una vergüenza que Diego Santos Díaz se pare frente a su pueblo para dar un informe ficticio de su administración”.
O el síndico procurador Sergio Díaz Jiménez: “¿Qué va informar Diego Santos cuando no ha informado dónde quedaron los recursos del 2008?, porque con los del 2009 está pagando facturas del año anterior”.
Sergio Díaz afirma: “Me da tristeza  y vergüenza haber formado parte de ese proyecto político en el que creímos, porque pensamos que era un hombre honorable por su amor a Dios, pero ahorita tiene a Tehuantepec sumido en el abandono, en el atraso  y en la corrupción”.
Y, más o menos en el mismo tenor es la opinión de la sociedad tehuantepecana sobre la corrupta administración dieguista.

“Muy grande la corrupción”
“La corrupción es muy grande —explica el regidor de Educación, Alfredo Rodas Cartas—. Para empezar, Diego designó a su suegro, Domingo Pacheco, como director de Obras y Desarrollo Urbano, un topógrafo que no puede tener el conocimiento necesario para ese importante rubro”, abunda; con eso hace a un lado al regidor de Obras, el ingeniero Héctor Torres; además, creó una oficina alterna, que controla Pacheco, y la ubicó lejos del palacio municipal, con el fin de que el regidor no pueda darse cuenta de la corrupción, ya que toda la documentación la mantienen en esa oficina a la que el ingeniero Héctor no tiene acceso”, agregan.
El regidor de Obras, Héctor Torres Sánchez, señala que, para aprobar las obras, le pidió al presidente Santos Díaz que le proporcionara las copias de los cheques que fueron pagados para tal fin y también la renuncia de su suegro como director de  Obras. Desde hace más de ocho meses está esperando la respuesta.
Rodas Cartas continúa incisivo: “Cuando Diego llegó a la presidencia, tenía una casa de clase media; actualmente es toda una residencia opulenta, ubicada frente a la iglesia católica del barrio Lieza.
“Si no está robando, entonces no sabemos de dónde salió la ‘lana’ para la casota que construyó Diego en Lieza, ni para la Touareg de su esposa, ni para la Pat Findher que él carga; cada una cuesta más de 700 mil pesos”, se explayan los inconformes.
Diego Santos es dueño de un rancho por la zona de María Lombardo, en la zona húmeda del istmo oaxaqueño, dónde ha laborado desde hace muchos años como profesor. “Pero en la pasada feria ganadera de Juchitán —informan los disidentes—  lo vieron comprar ganado de alto registro, seguramente para su rancho”.
El presidente municipal adeuda millones de pesos a diferentes contratistas o empresas constructoras que ya realizaron la obra que les encomendó el Ayuntamiento, sin embargo, aún no reciben el pago correspondiente, eso a pesar que ya recibió el recurso de parte de de la Secretaría de Finanzas, indican. “Además de que tiene como cincuenta “aviadores” en la nómina municipal, entre familiares y amigos”, agregan.
El anterior tesorero, Adad Ramírez Antonio, ingeniero eléctrico y ex gerente del banco HSBC, “del que fue despedido, entró como tesorero municipal recomendado por Adán Santos Díaz —explican los disidentes—. Luego trabajó en la Honda como agente de ventas; como tesorero lo corrieron, lo sacaron en enero. Diego lo corrió porque no quería darle más dinero a su hermano”, afirma otro.
“Se supone que son más de tres millones de pesos que el tesorero le prestó a los hermanos y familiares de Diego, sin que se recuperaran, y cuando se negó a seguir prestando, lo corrió”, agrega otro regidor.

¿Lo busca la justicia?
“¡Lo que se está viendo es una podredumbre, un robo descarado!”, afirma Sergio Díaz Jiménez, el síndico procurador y más acérrimo crítico de Diego Santos. Señala que entregó en la Procuraduría General de la República (PGR) de Salina Cruz la documentación que le fue requerida por las ocho obras que debió haber ejecutado el presidente de Tehuantepec, con recursos del programa federal Habitat en el año 2008.
A que a pesar que el requerimiento de la PGR lo recibió el 3 de julio, dice, esta no había cumplido con la entrega de la documentación porque la comisión de Hacienda no atendió la solicitud que les hiciera por escrito en varias ocasiones.
Indica que Diego Santos desvío recursos, porque el dinero que recibieron del 2008 “quién sabe dónde fue a parar y las obras las están pagando con recursos del 2009”.
El síndico procurador asegura que Diego Santos no sólo tiene integrada una averiguación previa en el órgano federal, ya que también le llegó un requerimiento de la PGJO por lo de las participaciones estatales.     
Sergio Díaz califica de “criminal el retraso en que los gobernantes han sumido a Tehuantepec y Diego Santos llegó a darles el tiro de gracia”. Porque, el año pasado, ejecutaron 90 millones de pesos de los cuales hay 40 millones que no aparecen, además de los ingresos propios, “que son la caja chica del presidente municipal y de los que le rinden informes al hermano del edil, Adán Santos Díaz, quien es el poder tras el trono”, denuncia el síndico.

Regidores cómplices
Lo que se sabe dentro del palacio municipal es que, al sentirse acorralado el munícipe y el asesor financiero del Ayuntamiento, Luis Enrique Pérez Hernández, Diego se aprestó a  comprar conciencias de algunos regidores, a quienes les ofreció de 50 mil a 100 mil pesos para que firmaran un acta falsa de cabildo con fecha 9 de enero, donde el cuerpo colegiado faculta  a Diego Santos para que, con recursos del 2009, pague obras del 2008. Con eso se autoriza un desvío de 29 millones de pesos, y con la cual pretenden presentarse ante la PGR para “lavarse las manos”.
“A esos regidores corruptos los va a juzgar la historia, pero exigiremos a la PGR que un  perito determine qué tiempo tiene la tinta con que firmaron para desmentir al edil”, dice Sergio Díaz. Hay que recordar que el 3 de julio el síndico procurador recibió un requerimiento de la PGR donde se le solicitó remita copia certificada de la relación de obras a ejecutarse en el ejercicio 2008 dentro del ramo 20 de Hábitat, así como las obras que correspondan al año 2009.
Por ello, el presidente municipal tiene en su contra una  Averiguación Previa que  se encuentra asentada en la  mesa 1 de la Agencia del Ministerio Público de la Federación, primera agencia con el número PGR/OAX/SC/1/79/2009.

No cumplió a Sedesol
Por otro lado, también se le critica al edil cristiano que no tome en cuenta a la juventud tehuana, ya que por acuerdo con la Secretaría de Desarrollo   Social (Sedesol), el gobierno federal, decidió invertir  cuatro millones 200 mil pesos para que el Ayuntamiento construyera cinco canchas de esparcimiento en varias colonias y barrios de Tehuantepec, que costarían ocho millones 400 mil pesos.
Ese recurso lo entregó Sedesol con el compromiso de que el gobierno de Santos Díaz aportara también otros cuatro millones 200 mil. Las obras se iniciaron en la colonia Benito Juárez (2), 20 de noviembre, El Cairo y el barrio Jalisco con el dinero de la federación, pero, ahí siguen, inconclusas porque Diego no ha aportado su parte, y se duda que lo que recibió se haya invertido en su totalidad.
Pero no termina ahí su actuación en el deporte. El año pasado,     Dónovan Rito García, titular de la Comisión del Deporte (CD) en el estado,  se comprometió con los jóvenes deportistas para construirles una cancha en el barrio Lieza; a su vez, le sacó un acuerdo al edil para que él también construyera otra cancha, en un lugar de su elección, que costaría 750 mil pesos, con ello, recibiría Tehuantepec tres millones y medio de la federación para usarlo en obras parecidas.
Sin embargo, otra vez, Diego Santos no cumplió.  La CD entregó su cancha terminada en el mes de diciembre; Santos no construyó la suya. Los tres millones y medio de la federación estuvieron a punto de suspenderse por faltar a ese punto de acuerdo. Dónovan maniobró con las autoridades federales y con el Comité de Planeación Para el Desarrollo del Estado (Coplade), en mezcla de recursos, ese dinero sí llegará a Tehuantepec y, se utiliza para la remodelación del campo de béisbol “Agricultura”.

Sedesol, cómplice
Sin embargo, a pesar de la pruebas sobre la desviación de esos recursos, Huberto Aldaz, delegado estatal de SEDESOL entrega más recursos millonarios a una presunta autoridad corrupta que no comprueba recursos federales del 2008
Aldaz ha señalado que Diego Santos no ha cumplido con el convenio del programa “Rescate de Espacios Públicos” del 2008 de la Sedesol, ya que no ha concluido sus cinco obras a un año de haberlas iniciado.
Informó que la dependencia aun no tiene el expediente técnico de las obras, porque aún no están terminadas, e indicó que de no recibir los documentos solicitara la devolución de los cuatro millones 200 mil pesos que le entregaron a Diego Santos Díaz.
No obstante que las obras no se han ejecutado al cien por ciento y Diego Santos Díaz ya pagó a la constructora PRISMA (con fecha 19 de febrero del 2009) la cantidad de un millón y medio de pesos, en su última visita a la ciudad de Juchitán, Huberto Aldaz —a pesar de que Diego no ha comprobado—, le entregó un cheque por cuatro millones quinientos mil pesos para el programa  Habitat que,  aunque es otro programa, no deja de ser de la misma dependencia, Sedesol.
Lo que produjo la enésima crítica del síndico procurador Sergio Díaz Jiménez: “Eso es una clara complicidad de quien  se esperaba un buen desempeño en la Sedesol, una esperanza para los indígenas de Oaxaca. Huberto Aldaz es cómplice de Diego Santos, porque el dinero que se repartieron, Aldaz lo usa para su campaña para la candidatura a la gubernatura por el PAN, ya que está pagando mucho dinero en medios estatales que con su sueldo no podría pagar”.
Agrega que mientras el presidente de la República lucha contra la corrupción, Aldaz Hernández, la fomenta con los municipios que se convierten en cómplices para hacer una campaña mediática en Oaxaca.

La bonita familia
Otra malversación de fondos públicos que los regidores achacan a Diego Santos, es el supuesto negocio de su  hermano Adán, quien, presuntamente es dueño de una casa de préstamos “Monte de la República” con sucursales en la región y en Tuxtepec. “Las casas de empeño las puso su hermano en este trienio, en septiembre u octubre, creemos que el dinero para los préstamos iniciales salieron de la tesorería municipal”, infieren. Adán, antes trabajó como empleado común en Nafinsa, pero, después de medio año, ahora tiene una Hummer, un BMW y un mini Couper, dicen los disidentes.
Uno de sus socios o asesores es Virgilio Hernández Gómez, ex gerente de Banamex; “de donde lo corrieron por desfalco —afirma un regidor e informa—: También está en nómina (municipal) como director de Planeación de Proyectos Estratégicos; además le renta al Ayuntamiento su casa junto a la Prepa, como si no hubiera lugar en el palacio para su oficina, y allí mismo vive,”.
Sin embargo, en realidad es un “aviador”, explican, porque Virgilio no ha propuesto al cabildo ningún plan ni estratégico ni elemental.  Sin embargo, es el gerente regional de las casa de préstamos en la región y lo suponen prestanombres de Adán Santos Díaz.
Le piden rendición de cuentas
La ley municipal señala que la función del regidor de Obras tiene la obligación de supervisar e inspeccionar todos los expedientes técnicos y que todos los recursos que obtenga el municipio para ello, sean aplicados para las obras priorizadas. Esto no lo puede hacer Héctor Torres.
El regidor responsable giró un oficio a su director con fecha 28 de abril de este año para que entregara los expedientes técnicos: no hubo respuesta. “No tienen (en Obras Públicas) ni un documento porque el presidente municipal tiene una oficina alterna que administra su suegro —recalca un regidor—; a pesar que no fue autorizada por el cabildo”.  
Interviene otro: “También la unidad técnica la movió este año, en abril, para que pueda  robar a gusto y no estén enterados de todas sus marranadas”.

Dinero del pueblo para
templos de su religión
“Otra raya más para Diego es la desviación de  recursos del pueblo para mejorar templos Adventistas, religión que profesa, y al pueblo que lo eligió lo tiene sumido en el abandono, en el atraso y la corrupción”, sostiene el síndico procurador, Sergio Díaz Jiménez.
“Benito Juárez promulgó las Leyes de Reforma  de separar a la iglesia, fuera cual fuere la religión, del estado, pero el munícipe se ha dedicado a remodelar los templos de su religión; les regala ventiladores, cuando ese dinero debería  aplicarse en obras que beneficie al pueblo”, expuso el representante legal del Ayuntamiento de Tehuantepec.
“Los pastores como ven su conveniencia piden a sus feligreses que oren por el hermano Diego Santos por que está siendo calumniado por Sergio Díaz quien se ha dedicado a obstaculizar su gobierno”, señala el síndico municipal. “Ahora resulta que el malo de  la película soy yo por denunciar las corruptelas y el enriquecimiento ilícito de toda la comisión de Hacienda, empezando por Diego Santos”, dice molesto el funcionario.
“De acuerdo a los comentarios vertidos por los feligreses de la religión cristiana, son los pastores que se niegan a aceptar los actos de corrupción de Diego Santos por así convenir a sus intereses, se niegan a aceptar que uno de sus discípulos traicionó los preceptos de la religión al cometer varios pecados capitales como es la mentira, la traición, el robo”, (sic).
No se cumplió con nada, lo que generó el enojo de la ciudadanía, “sobretodo de la gente que le dio su voto de confianza, porque esperaban el cambio prometido en la campaña. Los tehuantepecanos esperaban que se superara esa marginación y hundimiento que dejaron 75 años de priísmo, pero hoy Diego Santos le vino a dar la puntilla”.
“No tenía ni para los chescos”
El síndico municipal critica que Diego Santos se haya enriquecido descaradamente con el dinero del pueblo, porque “durante la campaña a la presidencia no tenía no tenía ni para comprar una ‘jumbo’”.
Sin embargo una vez que asumió el poder “se compró carros de lujo como son una camioneta Touareg; a su hermano le compró una Hummer, tiene un BMW y un Jetta del año; además de construir una residencia ostentosa que contrasta con la pobreza que existe en el municipio”.
“También tiene un rancho ganadero en la comunidad de Cotzocón Mixe donde cuenta con ganado de raza que cuenta con registro que adquirió en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. En la misma situación se encuentra el regidor de Hacienda, Ramón Peregrino, quien ahora es dueño residencias y de dos taxis, y cuando entró, sólo tenía un par de huaraches”.
Por todo lo anterior, los  regidores inconformes, han solicitado a la Cámara de diputados, la separación del cargo de Diego Santos, que sea auditada su administración y que los culpables de delitos sean castigados. Sigue el silencio cómplice.