Dávila, presidente de Tuxtepec acusa a siete regidores de extorsión

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Regidores querrían 5 millones; ellos denuncian opacidad del presidente

Santos Vera

 

En el grueso de la población, empero, predomina la opinión de que el presidente municipal y los regidores se están peleando por el millonario “diezmo” de las obras, hay quienes no dudan que Fernando Bautista Dávila se quiere llevar todo sin darle su parte a los otros, lo que, por supuesto, habría desatado la inconformidad de la mayoría de concejales. Finalmente, se arreglaron.

 

Tuxtepec.- Ante medios de comunicación, así como en redes sociales el presidente municipal de Tuxtepec, Fernando Bautista Dávila, exhibió a algunos de sus concejales por solicitar beneficios económicos a cambio de aprobar el primer paquete de obra pública.

 

Luego de que un grupo de regidores no asistieran a la sesión extraordinaria de cabildo que se convocó para aprobar ese primer paquete, la sesión tuvo que ser cancelada, no hubo quórum.

 

Tras este incidente, Bautista Dávila acompañado de los dos síndicos y cuatro regidores señaló a siete de los nueve regidores que faltaron a la sesión de haber solicitado beneficios a cambio de levantar la mano en el cabido y aprobar el primer paquete de obras.

 

De acuerdo a las declaraciones de Dávila del Partido del Trabajo (PT), los regidores de extracción priísta, Anilu Delfín y Julián Cruz Olivera le solicitaron la cantidad de 5 millones de pesos.

Agregó que en el caso del regidor de seguridad, Julián Cruz, en días pasados solicitó un crédito de 400 mil pesos al gobierno municipal. 

Mientras que el regidor de Morena, Germán Archila Ramírez, así como los regidores que le acompañaron en la planilla, Alvaro Bacelis Ugalde y Lupita Santos, le solicitaron obras para sus “amigos” constructores y de este modo verse beneficiados.

 

En el caso de la regidora Barzonista y quien también fue parte de su equipo de trabajo para llegar a la presidencia, Marie Claire Chávez, la acusó de convocar al resto de los regidores para no aprobar el primer paquete de obras.

“Ya basta de que los políticos lleguen a un cargo y quieran salir de pobres”, expresó el edil.

 

En el caso del Regidor Francisco Niño, aseveró que éste no le hizo alguna solicitud, sin embargo recordó que ha sido el que más faltas tiene en las sesiones de cabildo.
Visiblemente enojado, Fernando Bautista reiteró “no le vamos a dar dinero a los regidores para que se beneficien de manera personal”.

Al ser cuestionado sobre los mecanismos para que las obras no se retrasen, dijo que se buscará la manera de que la sesión donde se aprobarían 37 obras se lleve a cabo.

 

Ante los hechos y un visible divisionismo en el cabildo, el presidente manifestó que “si hay divisionismo asumo mi responsabilidad, pero a Tuxtepec yo vine a trabajar”.
El noveno regidor que faltó a la sesión fue, Guillermo Guardado Campa, quien solicitó un permiso.

 

Ese día se realizarían cinco sesiones de cabildo, en la primera se pretendía aprobar el primer paquete de obras públicas del ramo 33. Tras el incidente, el presidente y el resto del cabildo sesionó cada media hora, sin que se lograra contar con el quórum.

 

De acuerdo al reglamento municipal, se requiere de al menos nueve concejales para que se lleve a cabo una sesión de cabildo.
Regidores reviran: Dávila no da la información

 

Horas después de que Bautista Dávila los señaló de solicitar beneficios personales a cambio de aprobar las obras, los regidores negaron las acusaciones, sosteniendo que en ese gobierno municipal no existe transparencia.

 

El grupo de regidores señalados por el edil de solicitar 5 millones de pesos y obras para su beneficio, se reunieron para negar cada una de las acusaciones realizadas en su contra y exigir pruebas de dichos señalamientos.

 

Los regidores argumentaron que la falta de información con respecto a las obras, la ejecución de los recursos y el padrón de constructores, fue el motivo por el cual decidieron no asistir a “levantar la mano” para que se iniciarán las obras del ramo 33.

 

La primera en tomar la palabra fue la regidora Lupita Santos, quien días atrás declarara a los medios de comunicación ser capaz de meter las manos al fuego por la administración municipal. Todo lo contrario fueron sus nuevas declaraciones, pues afirmó que no existe transparencia por parte del presidente municipal, Fernando Bautista.

 

La regidora, que actuó como principal promotora del voto del hoy edil, anunció que interpondría una demanda por difamación y daño moral contra Bautista Dávila, luego de exhibirla y acusarla de solicitar obras para beneficiar a “sus amigos constructores”, también solicitó pruebas.
A esta petición se sumó la regidora de ecología, Anilu Delfín, quien dijo su falta se debió a problemas de salud.

 

Del mismo modo, Marie Claire Chávez afirmó que la falta de transparencia en las acciones o decisiones que se toman en la administración fue lo que, de manera personal la llevo a tomar la decisión de no presentarse a la sesión de este sábado.

 

Por su parte, Maritza Obrajeiro Almeida, de obras públicas señaló que hasta el momento no se les proporcionó la información necesaria sobre la obra pública, por lo que de presentarse llegaría sin conocimiento del tema, al igual que el resto de sus compañeros.

 

“Dávila se hace la víctima”

 

Alvaro Bacelis Ugalde, regidor de desarrollo urbano, dijo que ya se esperaban una situación similar, con base en “la forma de ser” del edil, debido a que pretende dar una imagen de víctima ante la población, por lo que manifestó que “no hay que creerle todo lo que diga”.

 

A esto se le sumó el regidor de desarrollo rural, Germán Archila de MORENA, quien solicitó al presidente que deje de mentir, “hoy mientes presidente, yo no he robado ni un peso”, fueron sus palabras tras aseverar que dichos actos se deben a que Dávila cuenta con mal asesoramiento.

 

Por su parte, Francisco Niño Hernández, quien no fue señalado por Dávila, habló de malos manejos al interior de la administración, mismos que en todo momento ha señalado de manera pública, manifestando su opinión durante las sesiones de cabildo.

 

De manera general, los concejales coincidieron en que actuarán de manera legal, calificaron de improcedente la revocación de mandato que pretenden proponer Dávila ante el Congreso, y anunciaron que más adelante darán a conocer otras situaciones que se viven al interior.

 

“No vine a construir hoteles”

 

El munícipe insistió sobre la solicitud de 5 millones de pesos que le hiciera la regidora Anilú Delfín del PRI, así como la petición para la entrega de obras a los concejales Germán Archila, Alvaro Bacelis, Lupita Santos Marisa Obrajero, junto con Julián Cruz Olivera del Revolucionario Institucional, quien había requerido, además de 5 millones de pesos, un crédito adicional por 400 mil pesos.

 

Por lo que consideró que el divisionismo ya marcado entre los miembros del cabildo, por supuesto que afecta al desarrollo del gobierno municipal, pero aunque afecte y haya divisionismo, el presidente municipal no debe dar recursos a sus concejales, afirmó. “Yo no vine a construir hoteles”, agregó aludiendo a su antecesor el Gordo Sacre acusado de usar el erario para incrementar los hoteles de su propiedad.

 

Finalmente se arreglaron

 

Emotivo dijo: “El dinero es del pueblo de Tuxtepec, para que se desarrollen las colonias y las comunidades”, y se preguntó: “¿Para evitar que no haya divisionismo (sic) debes darle dinero a los concejales?, ¡por supuesto que no?, se respondió.

 

En el grueso de la población, empero, predomina la opinión de que el presidente municipal y los regidores se están peleando por el millonario “diezmo” de las obras, hay quienes no dudaban que Fernando Bautista Dávila se quiere llevar todo sin darle su parte a los otros, lo que, por supuesto, habría desatado la inconformidad de la mayoría de concejales.

 

Finalmente, se arreglaron y de manera extrañamente eficiente hicieron en un solo día cinco sesiones de cabildo para la aprobación de las obras. Aprobó el cabildo todo, las 37 obras con el monto de 46 millones 402 mil156 pesos; eficaces hasta la ignominia, pues de paso aprobaron de manera ilegal ese contrasentido propuesto por el preclaro presidente de donar un terreno del municipio a la poderosa empresa Srx Polymers, productora de Kola Loca. Regaló el Ayuntamiento un bien del municipio, de toda la gente de Tuxtepec, un terreno con un valor de unos 20 millones de pesos.

 

Además, de inmediato empezaron a circular memes-videos que exaltan evidentemente a Dávila y hace mofa de sólo tres o cuatro de los regidores derrotados o echados a un lado, pues la mayoría ya había superado el“malentendido”. https://www.youtube.com/watch?v=5yq-z-XuRzE Así está hoy el Ayuntamiento de Tuxtepec.