Cuauhtémoc Blas
Hace unos días Oaxaca fue de nuevo motivo de escándalo por la enésima negligencia médica de la Secretaría de Salud estatal. Éste contra Pilar Sánchez Villavicencio quien en Huajuapan de León fue prácticamente lanzada a parir en la calle. Es importante apuntar que esos casos de escándalo sólo son los que se logran documentar, ilustrar de alguna manera con fotos o videos. El primero que tuvo repercusión nacional fue por la fotografía del momento del parto de la señora Irma López Aurelio indígena mazateca de San Felipe Usila.
Ahí no obstante estaba más que probada la negligencia médica, el Secretario de Salud en Oaxaca Germán Tenorio Vasconcelos se obstinó en desmentir esa irresponsabilidad de su personal. Todas las instancias institucionales que deberían revisar y castigar el caso fueron omisas o francamente cómplices de esa Secretaría de Salud encabezada por Tenorio.
La Comisión Estatal de Arbitraje Médico de Oaxaca (CEAMO), la Comisión Permanente de Salud Pública de la Cámara de diputados y la oficiosa Defensoría de Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca fueron exhibidas y dejadas en evidencia con la reciente recomendación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para el caso de Irma López Aurelio.
La oficiosa Defensoría de Derechos humanos de Oaxaca una vez conocida esa recomendación que la deja malparada apenas atinó a decir que analizará el caso. O sea, hará nada. Lo más que hace es emitir sus baratísimas alertas tempranas. Arturo Peimbert, un conocido personaje que tiene de defensor de derechos humanos lo que Germán Tenorio de Hipócrates, sólo está ahí para proteger al gobierno que lo puso en el cargo, el nombre de esa institución es otro monumento al engaño. Deja mal también este funcionario a la jerarquía católica eclesiástica que lo impuso a rajatabla, sin importar la recia oposición de grupos de derechos humanos de Oaxaca.
Por su parte, La CEAMO se exhibió no sólo subordinada sino hasta abyecta, con su resolución respecto al caso de la señora Irma y otra mujer de la misma etnia: “No hay negligencia médica. Son eventos fortuitos que salen de la competencia, los médicos tienen que dar un servicio eficiente, de calidad, oportuno y profesional; suceden estos detalles, bueno, hay niños que nacen en taxis, en las escaleras, en la puerta del hospital, porque son eventos fortuitos y esperamos que no se repitan.”
Pero igual que de Arturo Peimbert, la manera como llegó Mario Constantino Bustamante del Valle a titular de CEAMO explica tal abyección, a saber: “Sin trayectoria Mario Constantino, médico al que sus colegas califican sin trayectoria ni prestigio en Oaxaca, fue impuesto en ese cargo directamente de la mano de su amigo Germán Tenorio Vasconcelos, es producto exclusivamente del tráfico de influencias de ese grupo de familias elitistas de Oaxaca y quien ahora pagó ese nombramiento. Previsores sí los son.
“Con un Congreso obediente y también servil del ejecutivo esta importante Comisión se integró de tal manera que no sirve a la sociedad. El 30 de abril el Diario Noticias publicó los cuestionamientos de severas irregularidades a esa designación: Fausto Martínez Morales, uno de los aspirantes, miembro del Colegio Oaxaqueño de Medicina Interna señaló que participaron ocho colegios médicos, uno de especialistas, uno de médicos generales, uno de enfermeras, uno de odontólogos y uno de asociaciones y colegios de profesionistas en general. ´Es ahí en donde se encuentra la primera irregularidad —dijo—, pues la convocatoria claramente dice que está dirigida a colegio de médicos, no a otros profesionistas, que son respetables. Advirtió el médico que varios de los elegidos carecen de documentos que la convocatoria exigía, “título y cédula de médico general, título y diploma de médico especialista certificado, así como la respectiva recertificación.´”
“En Oaxaca está prohibido enfermarse los fines de semana”, acicateaba Gabino Cué durante su campaña electoral. Pero ahora parece que está prohibido siempre, sobre todo a las mujeres tener un parto atendido con calidad en clínicas de Salud. Pero ¿Por qué hemos llegado a estos niveles de degradación? Porque desde el principio el sector salud no se preparó para mejorar ese servicio. De acuerdo a documentos de personal que participó en las reuniones de planeación cuando el actual era gobierno electo no se atendieron las propuestas de cambios en Salud.
Las propuestas para mejorar el servicio fueron ignoradas casi por completo, como el respeto a los perfiles de puestos de mandos medios y directivos; revisión y redefinición de las áreas y población de responsabilidad de Centros de Salud y Hospitales; capacitación de su personal médico y paramédico y de los Centros de Salud; la falta de respeto a los perfiles de puesto, ha propiciado la falta de interés hacía la capacitación, la Programación, Supervisión y Evaluación. No hay voluntad política para resolver estas graves deficiencias y se cae a menudo en un desempeño del “como salga” y “lo que se pueda hacer”, omitiendo el desarrollo de las funciones sustantivas. http://www.revistaenmarcha.com.mx/columnas/para-que-la-cuna-apriete/1232-sector-salud-sin-preparacion-ni-planeacion-ceamo-servil-a-elite-medico-comercial-del-gobierno.html
Por el contrario, todo indica que para lo que se prepararon los actuales altos funcionarios fue para lo que hoy estamos viendo, la continuación de las prácticas corruptas en el ejercicio de los recursos federales administrados por funcionarios estatales en ese sector, así como con una Comisión de Arbitraje Médico tan a modo que su actuación más que lamentable está a la vista, igual que la Defensoría de Derechos Humanos y la Comisión Permanente de Salud Pública de la Cámara de diputados, cuya presidencia estuvo en manos de la ex diputada Marlene Aldeco y que en una caricatura de comparecencia del Secretario de Salud el año pasado, no en la sede del Congreso sino en el patio al aire libre del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, éste tuvo un paseo dominical. De pronto esa diputada dejó de mencionar la renuncia del funcionario, exigida en los ámbitos estatal, nacional e internacional, pero también los otros legisladores que ahí departieron, Flavio Sosa Villavicencio, Margarita García, Pavel López. Si por cada que alzaban la mano para aprobar leyes los diputados tenían una tarifa, ¿cuál habrá sido, en caso de que hubiera pasado lo mismo, por dejar impune tanto desastre en Salud?
Así, sólo quedaba en manos de las instituciones federales parar esta ola de negligencias médicas. Y la reciente recomendación de la CNDH ha puesto en evidencia con claridad la total la indefensión de los oaxaqueños ante malos funcionarios, quienes en vez de renunciar se afianzan en sus cargos. También está muy claro que no pueden resolver nada; ellos, esos funcionarios son el mayor problema. Y ahí seguirán porque para eso se prepararon, para hacer y deshacer impunemente.
www.revistaenmarcha.com.mx y lc.blas@gmail.com