Nunca como en estos últimos años la corrupción municipal fue tan extensa, tan abierta, tan impune. Además de contar con la evidente complicidad del ejecutivo del gobierno pasado y de la LX Legislatura. No se castigó a ningún Ayuntamiento no obstante las permanentes protestas de los ciudadanos de los municipios. La lista es abrumadora, por eso En Marcha atendiendo las propuestas de sus corresponsales y colaboradores pública en este número una parte de los peores presidentes municipales: Juchitán, Tuxtepec, Pochutla Huajuapan. Faltan varios más: Xoxocotlán, Santa Lucía del Camino, Matías Romero, Salina Cruz, Tehuantepec, Loxicha, etcétera.
En la “Heroica Juchitán” Mariano Santana
gastó mil 300 millones y no hay obras
JUCHITÁN, Oax.- Como una maldición, la historia negra de muchos municipios oaxaqueños se repite cada fin de trienio. Se “invierten millones” pero las obras no se concluye y las que se inauguran pocas están al cien por ciento.
En Juchitán este año no fue la excepción. Se invirtieron en el municipio más de mil 300 millones de pesos en obras que en su mayoría no se concluyeron pero sí fueron inauguradas con una sonrisa cómplice del alcalde y del todavía gobernador del estado Ulises Ruiz y miembros de su gabinete.
El de Mariano Santana fue uno de los peores gobiernos que se tenga conocimiento en la historia del municipio juchiteco “ni el de (Héctor) Matus ni el de (Alberto) Reyna fueron tan nefastos” aseguran sus propios trabajadores, humillados, engañados y decepcionados del primer gobierno emanado del Partido del Trabajo (PT) del que el aún edil es dirigente estatal.
El alcalde infló exageradamente la nómina municipal al pasar de mil 500, como lo recibió, a 2 mil el número de personas -pero no de trabajadores- que cobraban quincenal o semanalmente en el palacio juchiteco. Los sobres de los aviadores iban a parar directo a la presidencia desde donde se entregaban posteriormente o se reservaban como caja chica. La práctica es vox populi en los corredores del palacio. “Por eso no quiso que se pagara nunca con tarjeta en el banco” reprochaban los empleados.
Y en este país ya nadie se sorprende que haya aviadores en las nóminas de los diversos niveles de gobierno, pero en teoría, éstos no debían ser más que el número de empleados reales, sin embargo, en el DIF Municipal las cosas son diferentes; sólo 25 trabadores laboran, pero cada quincena se preparan los sobres para 75 personas, dinero que se ignora a dónde van a parar.
“Algunos sí llegan a cobrar aunque no trabajan, por ejemplo la hija del contador Hugo Sánchez y su yerno, pero muchos más no sabemos ni quiénes son y quién se queda con el dinero”, explica una empleada cansada del mal trato y el despotismo, pero obligada a seguir laborando por la necesidad de contar con un salario.
“No me gusta que le den de comer a los viejitos del arroz o del frijol que ya se comieron las ratas porque no se entregan a tiempo las despensas y ahí se queda todo almacenado, reparten sopas caducadas, y si algunos botellones de agua ya están rotos todo se va para el albergue de ancianos, es la orden del contador Hugo...no sé si la presidenta lo sabe pero eso hacen”, dijo.
La lista de quejas es larga, indigna y causa impotencia. “No es justo, cada que se termina un ayuntamiento se roban todo, aquí ya se llevaron el equipo de sonido era uno grande con una mezcladora marca Macky, bocinas y todo completo, quién sabe dónde fue a quedar, dicen que en la oficina de UCO (membrete de la familia López Nelio), pero quién sabe, aquí ya no está y trajeron también mucho material de limpieza ahora con las lluvias pero todo desapareció”, indicó.
Lo cierto es que la suerte parece estar del lado de las autoridades salientes, pues en el mes de septiembre, cuando personal del DIF estatal de la pasada administración acudió a levantar un inventario, las inundaciones provocaron que éste recorrido de supervisión se cancelara y no existe un inventario.
Los pequeños hurtos, el “robo hormiga” no se notan, pero los trabajadores saben de lo que sí había y lo que ahora ya no está.
Recuerdan por ello que al municipio le entregaron nueve camionetas Ford para patrullas, pero el alcalde Mariano Santana sólo mandó a pintar siete con el logo oficial de la policía municipal y dispuso de las otras dos para su uso personal.
“Sabemos que después llegaron dos patrullas marca Nissan de doble cabina también para andar de patrullas pero nunca las metió...¿a dónde se las llevó?, ¿dónde están?”, se preguntan.
Los bienes de Santana
Cuando Mariano Santana López llegó al palacio municipal sólo tenía una camioneta en la que no le gustaba que lo vieran los campesinos, “es mejor andar a pie o en un carrito, no me gusta que me vean en esa camioneta de lujo, nomás la uso para viajar a Oaxaca”, repetía una y otra vez para convencerse.
Al poco tiempo, el alcalde ya había adquirido con recursos del ayuntamiento una camioneta Chevrolet 2008 color guinda y una Pacífica color gris, que tanto el edil como su mujer, usan como vehículos de su propiedad e incluso pretenden agenciarse al término de su administración pues “ya no las sacan, tal vez para que se le olvide a la gente” dicen los trabajadores. Además de las camionetas que el Grupo Gurrión le ha “regalado” por su brillante comportamiento de entregarles la obra pública y no quejarse ante la mala calidad de las mismas, además de sus viajes a Cuba y casitas que agradecidos le han dado a Santana y familia.
En la séptima sección donde siempre vivió cerca de sus familiares, el alcalde juchiteco cuenta con una casa modesta que va a acorde con su imagen de maestro normalista o como dirigente campesino, pero en sólo dos años, la fortuna le sonrió al edil que ahora disfruta en el callejón Ignacio Nicolás en la sexta sección, de una hermosa casa estilo colonial con amplio corredor, cochera con cuatro vehículos entre ellos una Nitro blanca y un salón de fiestas climatizado.
Asimismo los vecinos aseguran que López Santiago y su mujer Rosa María Sánchez, son propietarios de una casa en la prolongación del circuito José F. Gómez, detrás de la subestación de la CFE al norte de la ciudad, de otra más en el fraccionamiento “Guiee Chachi” en la carretera Juchitán- El Espinal, otra más en el centro de la ciudad conocida como “Casa Valledor” y dos más en la capital del estado, una en la calle Crespo y otra en la colonia San Felipe.
Pero la excentricidad del que un día fuera luchador social llegó al grado en que adquirió en venta las tierras colindantes con su rancho y acrecentó su propiedad para echar a andar un zoológico sin gestionar los permisos ante Semarnat y sin más ni más, comenzó a comprar en el mercado negro jaguares, panteras, venados, monos y otras especies traídas de la selva Chimalapa.
Por supuesto, como campesino, Mariano Santana López no descuidó sus tierras y ahí a un costado del zoológico construyó su propio invernadero de los programas promovidos por el gobierno ulisista de donde periódicamente obtiene excelente cosecha de tomate, para lo cual ahora ya cuenta con su propio camión tipo torton.
Los fraudes de Santana
Los empresarios, comerciantes, constructores y todos quienes tuvieron trato con el edil juchiteco molestos por el retraso en el pago de las obras ya concluidas descubren los pequeños trucos y farsa con la que el edil burló las “reglas” de los programas federales.
“Yo ví como un día el ingeniero Vicente Castillo llevó a 50 barrenderas, gente de la Unión Campesina Oaxaqueña (UCO), les dio machetes a todas y las puso a que hicieran como que limpiaban el bordo del canal, les tomó las fotos, les quitó los machetes y las regresó a donde estaban... con eso sacaron recursos del Programa de Empleo Temporal (PET)”, aseguró uno de los testigos del fraude del alcalde petista quien explicó:
“Del PET para limpieza de canales el Ayuntamiento recibió vía Secretaría de Finanzas un total de 6 millones de pesos para lo que entregaron copias de credencial de elector de alrededor de 900 empleados entre barrenderas, trabajadores sindicalizados y personal que aglutina en la UCO, ese dinero no se le entregó a la gente, es más que obvio sólo los utilizaron”.
“Si la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL) hiciera una verdadera investigación de los recursos seguro que Mariano Santana se iría a la cárcel, las cifras de obras están súper infladas, todo lo de Hábitat es una burla, las obras están desechas y ya ni se ve lo que hicieron”, narra otro.
Pero el edil también se deshizo de lo que simplemente le molestaba y para ello tuvo aliados en otros municipios, como el famoso “guero transas” del puerto de Salina Cruz, dedicado a la compra-venta de fierro viejo, actividad con la que afirman algunos “disfraza” otro negocio más rentable: la venta de carros robados.
“Ahí vendieron como fierro viejo la barredora que compró el Dr. Héctor Matus y ahí le vendieron a Santana cinco volteos marca International de 14 metros cúbicos y los pintó de azul, les puso letras rojas a nombre de la presidencia y los comenzó a rentar al propio ayuntamiento con lo que se lleva varios miles de pesos al mes”.
Pero al alcalde eso no le interesa en lo absoluto, su preocupación ahora está centrada en cómo incrustarse en el equipo del nuevo gobierno, por lo que retomó su papel como dirigente estatal del Partido del Trabajo (PT) mediante el cual busca obtener al menos una dirección aunque aseguran que el mandatario le advirtió con palabras menos tersas: “primero arregla tus problemas”.
Y es que no es para menos, pues de las 11 obras magnas anunciadas para concluir en este año con una inversión de más de mil 300 millones de pesos, la mitad de ellas no se concluyeron.
Quedaron pendientes de concluir, entre otras, la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales con 70 millones, el Relleno Sanitario con 14 millones, la Rehabilitación del drenaje y el emisor con 90 millones de pesos, el desazolve del Río con 5 millones y el Periférico con 300 millones de pesos, pero los recursos se liberaron.
En el acto inaugural de la casa de la cultura -en la que el alcalde y su gobierno no intervinieron en lo absoluto-, Mariano Santana López Santiago agradeció a Ulises Ruiz Ortiz por el apoyo a Juchitán y agregó en referencia al entonces Secretario de Finanzas, Miguel Ángel Ortega Aabib, que, “muchas de estas obras se hicieron gracias a él” y efectivamente, pues la empresa constructora del entonces Secretario de Finanzas, fue la encargada de ejecutar varias obras que todavía hoy no se han concluido, pero fueron liquidadas puntualmente.