Santiago Chepi se “lleva al baile” a las facciones de la Sección 22, negocia a su favor y tensa las relaciones institucionales con grupos y delegaciones de la misma sección. Paga caro Bernardo Vásquez su novatada.
Es evidente la falta de un buen trabajo no sólo en materia de Plan Estatal (seguramente Sustentable) del nuevo gobierno, sino también en el ejercicio del poder público que el 4 de julio pasado lo oaxaqueños pusieron en sus manos. No es posible que no haya previsto la mejor manera de afrontar a su principal adversario: la Sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
Si como aspirantes al poder pensaron que la tenían de aliada, en el ejercicio del poder ya no es así, ya son sus adversarios como lo ha sido la 22 de todos los gobiernos desde su conversión en “Democrática” en los tiempos del “hermano Heladio”. Decimos que son adversarios o deberían considerarlos así por muchas razones, primero porque le impone a los gobiernos (Diódoro, Murat, Ulises) lo que desean y, segundo, porque se ha convertido en el más grande flagelo de la entidad al ser los principales responsables de la indigencia educativa de los oaxaqueños. No obstante, en otras circunstancias, con gobiernos que no prometieron grandes cambios, el magisterio ha sido: “Dique y sostén del régimen, crítico y cómplice, víctima y victimario”, define Víctor Leonel Juan, en el libro “Oaxaca 2006: autoritarismo, mitos y daños. Crítica al gobierno y magisterio”.
Sin educación de calidad no hay cambio
De manera que si el gobernador Gabino Cué, como todos sus antecesores, sólo quiere llevar la “fiesta en paz” con esa mafia sindical, será de nuevo, no solamente en detrimento del desarrollo educativo de Oaxaca, sino también de su gobierno al ceñirse a los dictados del más grande y poderoso grupo de presión, al entregarle, como lo hace hasta ahora, además de los puestos más importantes del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO) a distinguidos “grillos” de la 22, también las grandes decisiones que afectan en esta materia educativa (la más importante de cualquier pueblo) a los futuros ciudadanos.
Que quede claro: si no hay cambios de calidad y favorables en la educación del pueblo de Oaxaca, ¿de dónde?, ¿cómo podrá haberlos en otros renglones? No habrá cambios profundos sin mejorar la educación de los oaxaqueños. Ya lo previó Benito Juárez visionario: “La instrucción es la primera base de la prosperidad de un pueblo, a la vez que el medio más seguro de hacer imposible los abusos de poder”. Y sentenció: “Gobernar es educar”.
Por eso es grave esa falta de visión actual. Debieron aprovecharse todo esos meses como gobierno electo para que Gabino Cué y los suyos se avocaran a pertrecharse para acometer con eficacia estos retos.
Improvisar, la tónica
¿Por qué improvisar al director del IEEPO y no prepararse con antelación? Los resultados están a la vista. Lo primero que mostró el actual director, Bernardo Vásquez Guzmán, fue un ominoso temor a la Sección 22, cuando para congraciarse con ésta negó toda relación institucional con la Sección 59. Afecta su falta de conocimiento del medio, que cada vez más calienta el ambiente entre los grupos facciosos que conforman la 22: UTE, PRAXIS, CODEMO, COMAO… Desconoce que a diferencia de otros sindicatos, en éste el Secretario General no tiene todo el poder. Y hay que consensar con las no menos poderosas facciones. De ahí que se estén tensando los celos y rivalidades entre los grupos al acaparar el Secretario General, Azael Santiago Chepi, los productos de las negociaciones para llevar la “fiesta en paz” con el gobierno.
Uno de esos productos a favor de Chepi fue, nada menos, que la entrega que le hizo el director del IEEPO de la muy importante Coordinación de Educación Básica y Normal en la persona de su incondicional, el profesor jubilado Fernando Espinosa. La influencia de esta coordinación es amplia pues en casi todos los pueblos de Oaxaca hay escuelas primarias. De ahí que anteriores gobiernos fueran reacios a entregarla. Aunque, después de escarceos, ha negociado Bernardo con otros cabecillas, como Rogelio Garfias de la UTE, cree que por ello puede ningunear a los demás, sobre todo a delegaciones y empleados, a quienes se niega a recibir.
Confrontación con la D-III-4
De ahí la innecesaria confrontación con la Delegación D-III-4, conformada por el personal administrativo que labora en el edificio central del IEEPO, quienes en consonancia con el discurso del cambio exigen la salida de los políticos reciclados que Bernardo está metiendo de nuevo al IEEPO o dejando en sus cargos. Incluso bloquearon la entrada a sus oficinas de Jaime Antonio García Moreno, por ejemplo, quien fuera hasta hace poco jefe de Registros y Controles, hombre clave subordinado de Víctor Manuel Bautista Hernández (el capo di tutti capi), este último también hasta hace poco poderoso Coordinador de Relaciones Laborales, y hoy asesor quién sabe en qué de Bernardo. Jaime Antonio, desde este martes 25 de enero en que le impidieron su ingreso, dejó el cargo.
Nada quieren saber de esos funcionarios amafiados, exigen su salida y también de sus beneficiarios, como el hermano de Bautista, a quien tiene como proveedor general externo y surte de material a escuelas y oficinas, con ganancias fabulosas.
Otra muestra de la excesiva confianza del gobierno en Chepi (que cobra todo lo que puede a toda prisa antes que sus pares le cierren las llaves) fue la reunión que éste pactó con Bernardo Vásquez realizar este 18 de enero en el Hotel Gobernador, lo que fue la Casa oficial. Al enterarse los jefes de las corrientes estallaron pues no les pareció esa actitud que consideraron cortesana, y exigieron cambio de sede.
Tensas relaciones
Después de ríspidas discusiones se trasladaron al Hotel Calesa Real. La reunión siguió ríspida, bajo consignas de “Gabino, entiende, la 22 no se vende”, ¿No?. Entre tantas cosas, advirtieron que van a analizar si aceptan el cambio en el organigrama del IEEPO, pues no les pareció que se haya creado, en evidente duplicidad de funciones, una Dirección de Educación Media Superior, Superior y de Investigación Científica ajena al IEEPO donde aún funciona la Dirección de Educación Superior que hasta hace poco dirigía el ex rector de la UABJO, Hermenegildo Velázquez Ayala, y donde recién tomó posesión María Soledad Candiani, sobrina de Gerardo Gutiérrez Candiani, el empresario con gran influencia en su amigo el gobernador.
La nueva dirección, un organismo auxiliar del poder ejecutivo, que no se sabe qué hace ni dónde se ubica, tiene como titular a José Antonio Carranza Palacios y recién nombraron director de Educación Superior al también universitario Isidoro Yescas Martínez. Al “Tokio”, como es mejor conocido el ex rector (y compadre de Gutiérrez Candiani), no lo dejaron sin cargo y fue nombrado Coordinador de Delegaciones Regionales y Descentralización Educativa. “Tokio” coordinó los foros de educación en la campaña del candidato del PRI, Eviel Pérez Magaña.
Fuerte puede ser la asamblea estatal pospuesta (a raíz de la muerte del profesor istmeño en el hotel del Magisterio, uno de los más radicales y críticos de Chepi), con temas delicados a tratar o a negociar para no tocarlos en ella. Entre los puntos a tratar amagan con pedir la cabeza del actual director del IEEPO. Y no sólo eso.