Lo que pasa en la administración pública de Oaxaca es escandaloso, verdaderamente alarmante. Hay no sólo evidencias sino pruebas fehacientes de los errores de los altos funcionarios de este gobierno y siguen en sus cargos como si nada. Al contrario parecen premiados por hacer perder a Oaxaca miles de millones de pesos, lo cual es imperdonable en un estado de los más pobres de México como el nuestro.
Contraviniendo la voluntad popular SINFRA siguió con el repudiado proyecto de la Velaria ulisista y no sólo cambió ese proyecto original sino que lo culminó de edificar sin ningún control de calidad pues en pocos meses cayó estrepitosamente. Y es la hora en que no entregan el peritaje de esa pifia. Junto con ese peritaje debería Netzahualcóyotl Salvatierra, titular de esa dependencia, entregar su renuncia. Pues no puede darse el lujo de hacer el ridículo con el erario, ahora al darse a conocer que las llamadas trabes del mal llamado distribuidor vial de Cinco Señores no fueron debidamente calculados para encajar en la estructura que sostendrá ese puente.
Salvatierra por el contrario seguramente será premiado con más obras y seguirá apareciendo al lado del gobernador en las fotografías de actos oficiales. En tanto los ineptos son premiados, aquellos que hacen bien su trabajo son despedidos como el hasta hace unos días Director de la Casa de la Cultura de Oaxaca, quien fue corrido para instalar ahí a un emisario del pasado, eterno vividor de puestos públicos: Guillermo García Manzano.
Pero quien se lleva oreja, rabo y lo demás es nada menos que el fundador de la Unión Campesina Democrática (UCD), Salomón Jara Cruz quien llegó a recibir merced a su labor de presión tribal hasta 15 millones de pesos a fondo perdido con José Murat; actualmente es Secretario y persiste en su negocio de presión, juez y parte. Se sabe que los sucesivos gobiernos de Oaxaca tienen una cantidad de dinero destinado exclusivamente a grupos de presión política (300 millones el año pasado) o sea a grupos improductivos, y otra cantidad para los verdaderos productores. Pues bien Jara busca beneficiar exclusivamente a los suyos y olvidar a los segundos. En esta parte del editorial de la revista En Marcha se resume parte de los daños que desde su alto cargo desarrolla Jara en contra de miles de productores oaxaqueños:
La Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Forestal, Pesca y Acuacultura (Sedafpa) que dirige Salomón Jara Cruz es un caos, en el año 2011 por la pésima administración de Salomón fueron devueltos a la federación 600 millones de pesos por incapacidad de ejercicio. Lo que argumenta en su defensa Jara Cruz es que los responsables son los productores
que deben comprobar los apoyos. Solicitudes, proyectos y expedientes técnicos estaban en las mesas de los funcionarios de Sedafpa para obtener esos recursos y aplicarlos en proyectos productivos, nunca se les atendió. Ahora, por esta incapacidad de ejercicio la Federación recortó 400 millones de pesos a Oaxaca en 2012, con lo cual suma la fabulosa cantidad de mil millones de pesos perdidos.
Demasiada pérdida sólo por culpa de un inepto, que se rodeó de un grupito de ineptos en esa Secretaría. El personal
técnico de la dependencia es ignorado y sólo hasta que la federación le urge al secretario justificar con proyectos los recursos etiquetados para Oaxaca, éste recurre a dichos técnicos que sólo entonces son escuchado, aunque ya sólo pueden decir: “Es tarde secretario, los proyectos ahí estaban, usted nunca nos atendió”.
Los productores, por su parte, desconcertados no se explican cómo es que ese funcionario teniendo el dinero público federal ya en cartera no lo entrega a quienes lo necesitan para apoyar su producción, “estamos listos con papeles y expedientes para justificar la entrega de los recursos y simplemente no lo hace porque no le da la gana y el dinero se pierde; prefiere Salomón que se regrese a México a que nos sirva en Oaxaca”, dicen.
En sus comparecencias ante la Cámara de diputados local Salomón fue duramente vapuleado, exhibido en su incompetencia y grave daño a los productores, cuestionado sobre esos altos subejercicios. Incluso conminado a renunciar. La diputada panista Martha Patricia Campos le dijo en corto y de frente: “Salomón eres una piedrota en el zapato de Gabino, si quieres ayudarlo debes renunciar”.
La prensa también le preguntaba al salir de la comparecencia “¿Cuando renuncia secretario?” Pero éste de manera insólita respondía: “Tengo autoridad moral (sic), tenemos proyectos”. Pero esa insostenible autoridad moral que presume encuentra contradicción con denuncias jurídicas ante la Procuraduría General de la República, donde particulares y representantes populares lo acusan de peculado.
En la primera comparecencia aceptó Salomón Jara haber incurrido en peculado al desviar 30 millones de pesos de 190 millones destinados al programa Sistema-producto. Tomé ese dinero para “puentear”, dijo públicamente, confesó incurrir en peculado, tipificado como delito al desviar recursos públicos. La desventaja del gobierno actual, que llegó mediante una alianza de partidos, es que tuvo que pagar cuotas de poder a esos partidos, a grupos de poder y a personajes que lo apoyaron con recursos, maniobras, gente. Es el caso de Salomón Jara, inamovible hombre en Oaxaca de Andrés Manuel
López Obrador y René Bejarano, o de políticos como José Murat, Jorge Franco, etc. Con estas recias personalidades imposible armar un gobierno con los mejores hombres de Oaxaca como ofrecía el gobierno del “cambio”. (Ver www.revistaenmarcha.com.mx)