Sección 22, principal flagelo de Oaxaca
¿La defienden por interés o ignorancia?
Homero Villaurrutia
Primera parte
A 10 meses de permanecer en el zócalo de Oaxaca, la Sección 22 ha dañado mucho a la entidad. A los niños que se quedan sin clases; a los ciudadanos que se ven impedidos de realizar su trabajo por los bloqueos; a quienes han sufrido quebrantos con sus negocios en el centro del Oaxaca turístico, más de 300 negocios que afectan a 1 mil 500 empleados. De todos, el peor daño que hacen es cancelar el futuro de generaciones de oaxaqueños al tener secuestrada su educación durante 35 años.
Para el que quiere ver ha quedado muy claro que el gremio magisterial no se encuentra en pie de lucha desde hace 35 años en Oaxaca. El binomio mejor educación y mejor salario que debió ser indisoluble, nunca lo tuvo presente este magisterio pues sólo con un trabajo de calidad se puede tener fuerza moral para exigir mayor salario.
Por eso quien se pone a defender y ensalzar al movimiento magisterial o es beneficiario directo del mismo o indirecto como familiar o compañero de alguna ruta similar. Dado que no es posible no ver el daño enorme que ese gremio infringe al pueblo entero de Oaxaca.